Basta con alejarse unos 15-20 minutos en barco desde Cannes para encontrar el paraíso. Dos islas – Isla de San Honorato y su hermana isla de Santa Margarita, contrastan con la ciudad de lujo: la naturaleza omnipresente, los pinos, los eucaliptos, la lavanda y los viñedos. No hay aquí hoteles del estilo Belle Epoque, ni el bullicio de la ciudad, bares y discotecas. Hay silencio, tranquilidad, naturaleza e historia. En la isla de Santa Margarita se escuchan las historias del hombre de la máscara de hierro, y los hugonotes que aquí fueron encarcelados. En cambio en la isla de San Honorato se encuentran también los monjes que habitan en ella desde el siglo IV.
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